Historia

Don Eduardo M. Vargas

Fue un historiador Irapuatense nacido en 1867.

Los primeros pobladores llegados a la región de la actual Irapuato pertenecían al grupo étnico llamado chichimeca, (hacia el año 1200 d.c.) que traducido al castellano significa "perro con sarna"

los tarascos proceden de Michoacán le impusieron el nombre de Xiriqüitzio o Iriquitzio, vocablo que los descubridores castellanos pronunciaban "Jirucuicho". Sus moradores tarascos acabaron por llamarle Jiricuato, "casas o habitaciones bajas".
Donde actualmente se encuentra asentada la ciudad, se encontraba una enorme laguna formada por las aguas de los ríos Guanajuato y Silao. Los primeros pobladores del lugar, seguramente se establecieron en las orillas del lugar, como así lo demuestran las ruinas arqueológicas encontradas en el cerro de Arandas, Rancho Grande y otras mas.
Con el tiempo los asentamientos humanos se extendieron a las zonas que aparecían en las etapas de desecación de la laguna, de manera temporal, en el sitio que actualmente ocupa la ciudad y cuando reaparecían poco a poco, la aguas de los ríos desviaban dichos asentamientos, dando lugar a una configuración asimétrica que se nota en la actual Irapuato. De esta manera se fue conformado la ciudad, el año de 1556 se hizo merced de un sitio para ganado mayor. Posteriormente en 1589 en cumplimiento de las disposiciones de la ley de Congregaciones se le dio a la estancia la calidad de Congregación, no siendo reconocida como tal sino hasta el año de 1893, en que fuera elevada a la categoría de ciudad, por decreto 29 del Congreso del nuevo Estado de Guanajuato.
Con el tiempo las estancias y los sitios de ganado mayor fueron desapareciendo, y el régimen de propiedad fue paulatinamente cambiando. Aparecieron los ranchos y las haciendas, lo que hizo que las tierras de cultivo quedaran en manos de unas cuantas familias, por supuesto españolas peninsulares.
Las autoridades virreinales compartían una simpatía con estas familias, y en forma igual florecían tanto la cultura, que el despotismo y la esclavitud. La horticultura y la floricultura, fueron refugio de los naturales que se les empleaba en las grandes haciendas, la plata de fresa fue importada de Francia a México en 1849, traída a esta ciudad el año de 1852, por Don Nicolás Tejeda; en total se trajeron 24 plantas de las cuales fueron colocadas en un almácigo, a orillas del río Guanajuato, permaneciendo ahí las plantitas sin cultivar. Fue hasta el año de 1858 cuando se adquirieron plantíos y se comenzó a desarrollar el cultivo de la frutilla; e incluso por medio del injerto obteniéndose con ello excelentes resultados, sobre todo en la huerta de San Antonio de Retana. La comercialización de la fresa y su cultivo intensivo se debe a dos personas: Carlos Drogge y a Joaquín Chico González, este último hizo los embarques de fresa a México, al contarse con la vía de ferrocarril Central. Actualmente, Irapuato ocupa el primer lugar en la producción de fresa en el Estado y el segundo a nivel nacional.
La arriería floreció en Irapuato, y con ella la talabartería se convirtió en industria próspera, así como la fabricación de artefactos de fierro y bronce. Igualmente eran notables las manufacturas de la lana e hilaza.
Los canteros de Irapuato siempre han tenido fama de buenos artistas, dejando como testimonio perenne de esa época de oro, las hermosas fachadas de templos y edificios. Gran habilidad tuvieron también los fabricantes de imágenes y los pintores.
Fueron muchos los benefactores que se cuentan en esa época de la colonia. Podemos mencionar al Bachiller Presbítero Don Ramón Barreto de Tábora que pensando en la educación de los niños y niñas del poblado donó terrenos para escuelas y dinero para otras edificaciones, entre ellas el Colegio de la Enseñanza (hoy Palacio Municipal), el templo de San Francisco cuyo atrio comprendía incluso lo que hoy es el Jardín Hidalgo, y el desaparecido Convento de Franciscanos, hoy escuela Secundaria Oficial y Auditorio Municipal.
Irapuato se convertía así en plaza de depósito de mercaderías, y las tantas y ferias fueron institucionalizadas, alcanzando fama nacional. En ese clima de paz, aparente y de quietud, se gestaba el fuego interno de la inconformidad política y social. De esta manera el Bajío fue escenario de batallas en las Don Miguel Hidalgo era abanderado de esa gesta heroica.
El 25 de septiembre de 1810 entran los insurgentes a la ciudad, uniéndoseles el Regimiento del Príncipe. Clave de comunicaciones, Irapuato, era sede del poder militar realista. Lugar estratégico de movimientos, en que casi núnca fue abandonado por las tropas del virreinato.
Igual que en los tiempos pasados, las inundaciones de Irapuato eran periódicas, entre otras se recuerdan las 1741, 1760, 1768, y la más catastrófica de todas, la de 1820, en que los barrios de la Salud y de San Cayetano, desaparecieron totalmente, quedando en pie solamente las edificaciones de ambas Iglesias, pues el agua duró estancada por mas de 30 días.
Poco antes del levantamiento de Hidalgo, el eminente sabio alemán Alexander Von Humboldt realiza una investigación sobre las ruinas del pasado indígena del cerro de Bernalejo y los llamados cuisillos.
Agustín de Iturbide, vivió en Irapuato en la casa que actualmente se encuentra localizada entre las calles de Altamira y Revolución, también en esa casa nació su hijo Salvador que fuera bautizado en la Iglesia parroquial de la Soledad.
Por ello, que Irapuato fuera de las primeras plazas en donde se juró el Plan de Iguala y se enarboló la Bandera de las Tres Garantías, promulgándose en forma solemne la Independencia de México por Don Anastasio Bustamante, el día 25 de marzo de 1821.
Con todo esto vendrían tiempo después, el Primer Imperio y luego la primera República Federal.
En el año de 1833, Irapuato fue escenario de una peste llamada "el cólera grande", la cual diezma con la población de Irapuato. Durante la invasión norteamericana (1846-1848), 500 jóvenes irapuatenses se alistaron voluntariamente en la Guardia Cívica Militar, peleando valerosamente en la batalla de la Angostura. El primer abanderado fue José María Maciel, después el Capitán Martín Ramírez, y el jefe de Armas Máximo Guerrero. La bandera de Irapuato llevaba los colores nacionales con la leyenda: "Guardia Nacional de Irapuato" "Bandera 22". Otro abanderado lo fue el jóven Manuel Bocanegra.
Un grupo de soldados irlandeses se sumó a las tropas mexicanas denominándose Batallón de San Patricio, que la ver la causa justa por la que peleaban los mexicanos, decidieron cambiar de bando, se alojaron en Irapuato en el Mesón de la Purísima, frente al antiguo mercado. Se recuerda este noble gesto del año de 1847.
Acontecimientos trascendentales ocurridos en Irapuato durante el siglo XIX.
El 25 de marzo de 1826 se inaugura el servicio de correos. El repartidor del Rio Silao, para enviar agua por el rumbo de la Soledad fue establecido el año de 1843.
El 18 de junio de 1858 atacó a Irapuato el General Pueblita, y pocos meses después casi destruyen a la villa por el saqueo y el incendió, loas Grales, Esteban Coronado y Miguel Blanco.
El año de 1863 las tropas invasoras de Francia llegan a Irapuato, estableciéndose en zona boscosa cerca del Templo de San Antonio, que desde entonces se llamó Bosque de los Franceses.
Visita a la villa de Irapuato el año de 1865, el Emperador Maximiliano de Habsburgo, durante este mismo año llega la primera imprenta, traída por Don Vicente Cervantes.
La Emperatriz Carlota, conoce la villa en 1867, llamado la atención su imponente escolta ataviada en uniformes rojos, motivo por el cual el populacho les puso el mote de "los chancharros" (hormigas).
El General Porfirio Díaz es recibido por las autoridades municipales el año de 1876. dos años después se verifica la primera exposición municipal, que fue la Segunda de la República.
El Profesor Don Daniel Ginori publicó el primer periódico de la villa en 1878, intitulado "El primogénito". Las exposiciones municipales se repitieron durante varios años, a partir del 12 de enero.
El ferrocarril de Irapuato a Celaya corrió por primera vez el año de 1880, dos años después se inaugura el Central, de Irapuato a Ciudad Juárez, y en 1888, se establece la línea México a Guadalajara vía Irapuato.
La primera Biblioteca Pública Municipal fue inaugurada por Don Vicente Riva Palacio el año de 1898.
La luz eléctrica se estrenó con gran regocijo popular y grandes fiestas el año de 1900, aprovechando la naciente energía, Don José y Don Eduardo Fox instalaron una gran fábrica de coches y carretelas que tuvo un gran éxito nacional. Don Carlos K. Furber y Don Enrique del Moral fueron de los pioneros de la industria en Irapuato en el ramo de fundiciones y tenería, cerrándose así un siglo de guerras, tanto civiles como internacionales, de inventos, cambios políticos, sociales, económicos, y sobre todo un desarrollo tecnológico para el bienestar de México.
ETAPA REVOLUCIONARIA.
Por su ubicación geográfica y ferroviaria, más que por su posición política Irapuato, conoció de cerca algunos acontecimientos bélicos que se dieron en el corredor abajeño, sobre todo en el periodo de lucha entre las fuerzas constitucionalistas y villistas. La primera ola de alzamientos ligado a la causa maderista, que se dio en Irapuato estuvo a cargo del agricultor Don Pedro Covarrubias quien si se lo proponía podía causar graves problemas a la capital del estado y desde luego a Irapuato. Del 11 al 28 de abril de 1912, Irapuato sufre ataques por parte de grupos zapatistas, posteriormente el 29 de julio de 1914 una de las avanzadas del General Alvaro Obregón procedente de Jalisco a cargo del General Ramón Sosa y del Coronel Miguel Acosta, toma la ciudad de Irapuato, que era defendida por las huertistas. El 4 de abril de 1915, cuando el ejército constitucionalista ocupa Celaya, el Gran Francisco Villa llegó a Irapuato acompañado de su estado mayor y algunos 20,000 hombres, su estancia fue de pocos días, dado que dos brigadas de los constitucionalistas venían de Celaya.
El 21 de abril de 1915 llega a Irapuato el General Alvaro Obregón con el grueso del ejército de operaciones en plena acomedida contra Villa. Entre los días del 21 al 27 de abril hay un intenso movimiento de ferrocarriles y de gente, en la estación de Irapuato se concentran municiones, víveres y tropas, con la finalidad de prepararse para la batalla de Trinidad. Ante todo esto el General Villa intenta aislar a las huestes obregonistas y para ello envía a los Grales. Rodolfo Fierro y a Canuto, las líneas de transmisión desde Lagos de Moreno, Jalisco hasta Irapuato. El 15 de julio de 1915, el General Obregón dio la orden al General Joaquín Amaro de trasladarse al Bajío y de dejar una guarnición en Irapuato, desde donde siguió el movimiento de tropas en campaña contra el General Rodolfo Fierro.
ÉPOCA CONTEMPORÁNEA.
La electrificación causó asombro entre la población (1900), pero además revolucionó la industria, que hasta entonces utilizaba la fuerza de vapor. En 1902 se llevó a cabo la industrialización hidráulica para surtir de agua a las fuentes e hidrantes de la ciudad: hacia el año de 1907 se estableció sucursal del Banco Nacional de México. Poco tiempo después el 29 de septiembre de 1909 es inaugurado el mercado Joaquín Obregón González (actualmente ha desaparecido), al día siguiente entra en función el hospital de Nuestra Señora de Guadalupe. Siendo Presidente Municipal Don Agustín Zambrano, aplica el decreto sobre el salario mínimo (10 de septiembre de 1914), siendo de 75 centavos, la jornada de 9 horas. Al año siguiente se establece el descanso dominical, el periodo vacacional con goce de sueldo, el descanso obligatorio en los días de justa nacional: Jueves y Viernes Santos, 1ro de enero, el 12 y 25 de diciembre.
A mediados de 1914, en plena Revolución Mexicana, las líneas ferroviarias se ven interrumpidas, provocando la escasez de alimentos y demás artículos de primera necesidad, por lo tanto el gobierno establece ciertas medidas para aliviar esta situación. Irapuato recibe al Primer Jefe Constitucionalista, de Venustiano Carranza.
En 1919, el General Alvaro Obregón llega a Irapuato para presentar su plan de Gobierno, ya que era candidato a la Presidencia de la República. El 30 de abril de 1922, el Obispo de León, Don Emeterio Valverde y Téllez corona a la Santísima Virgen de la Soledad, patrona de Irapuato.
En la década de los veintes hay nuevamente un repunte en la actividad industrial irapuatense, aparecen nuevas fábricas y comercios; haciendo indispensable la necesidad de servicios indispensables para la población. Durante la etapa cristera Irapuato sufrió relativamente poco, ya que se verificó solamente un levantamiento armado, el cual fue liderado por Don Zenón Ayala vecino del barrio de Santa Ana; quien fue aprendido y fusilado en el Atrio de la Parroquia. El 29 de julio de 1926, se recibe la notificación de la suspensión de cultos en el Estado de Guanajuato, ordenándose además el inventario de los objetos de culto y que se organizara una junta de vecinos encargados de cerrar los templos, cosa que nunca se llevo a cabo.
Durante la década de los cuarentas, la actividad industrial y comercial estaba preparada para cubrir las necesidades provocadas por la Segunda Guerra Mundial, de esta manera la industria cigarrera triplicó su producción, también durante esta etapa miles de braceros irapuatenses fueron contratados para ir a trabajar a los campos agrícolas del estado norteamericano de California, Texas e Illinois. Aparecen la primeras congeladoras y empacadoras de fresa.
A partir de la década de los cincuentas, Irapuato va teniendo un repunte en su actividad económica, la amplia cosecha de la fresa, las congeladoras, las fábricas y los talleres de pantalones y de camisas favorecen sustancialmente a la actividad comercial tanto regionalmente como a nivel nacional e internacional, así como los servicios profesionales. Durante ésta época se edifican bonitos y vistosos monumentos, por ejemplo: el de la Bandera Nacional, a los niños Héroes, a la Madre, al Himno Nacional, a Don Vasco de Quiroga, etc.
Se crearon escuelas primarias, normales, preparatorias. Con la realización del Plan Guanajuato (década de los sesentas), el paisaje urbano se vio modificado, se iniciaba la modernidad propiamente, tiendas departamentales se habrían a una población de bienes de mejor calidad; el transporte giró a favor de los carros y camiones que llegaban a la central, la estación ferrocarrilera pasa a un segundo término después de 80 años de actividad y que fue factor determinante para el desarrollo económico industrial, comercial y social de Irapuato. El 18 de agosto de 1973, Irapuato sufrió una inundación muy severa, este fenómeno se repetía con frecuencia por la abundancia de lluvias, después de esta catástrofe Irapuato creció en población y tuvo la necesidad nuevamente de crear fuentes de trabajo para abatir los altos índices de desempleo.